"Detrás de las paredes" es un claro ejemplo de cómo un trailer puede hacer que tengas una visión totalmente diferente de una película y perjudicar seriamente la asistencia de público. Veréis, cuando vi su trailer pensé: "Bah, otra mierda de pseudoterror más con casas encantadas y familias vulnerables". Pero obligada a verla por una amiga descubrí una muy buena película. Al pincipio ya tenía prejuicios, de hecho me pegué buena parte haciendo el tonto. Riéndome del guión, de las escenas intigrantes y de los elementos típicos del terror. Pero según fue avanzando pasé por varias fases. La primera la confusión. No tenía ni puñetera idea de qué iba aconteciendo. Y tal vez fue ese el hecho que hizo que me interesara más y más por el argumento. Cuando descubrí cuál era el motivo de todo lo que ocurría mi corazón se encogió. No esperaba para nada un desenlace así. Y tengo que deciros que salvo el doblaje que me parece una mierda, la película es muy recomendable, inclusive a aquellos que detestáis el terror, pues, lejos de ser una película de casas encantadas, tiene un transfondo muchísimo más profundo.
De entrada tiene un cartel bastante decente. Sí que es cierto que tiene reminiscencias de otras películas del género como "El resplandor" o incluso de la última prota de Jueves del horror: "Los otros". Pero apartando eso, que es bastante frecuente en los carteles de las pelis (y si no probad a comparar carteles de diferentes pelis que hayáis visto últimamente y descubriréis la frecuencia con que se repiten los mismos patrones en el diseño.) Luego destacaría la interpretación. Tanto Naomi Watts como Daniel Craig como Rachel Weisz están estupendos. Daniel Craig cuando no hace cine muy comercial me gusta bastante. Es sencillo en la interpretación pero potable. Muy creíble. Y ellas son sublimes. Maravillosas.
A efectos técnicos está bien. Buena fotografía, buena iluminación (algo que no es frecuente en el género, pues a menos iluminación, peores son los efectos de una peli. Y todo esto os lo he dicho gratis, para que luego os quejéis de mí...) y buenos planos. Tiene buen contenido de terror pero también es altamente dramática. El guión pega un giro que no te esperas y vale la pena verla.
Will (Daniel Craig) es un editor que deja su trabajo para irse con su mujer (Rachel Weisz) y sus hijas a Nueva Inglaterra y pronto descubrirán que conviven con otros inquilinos, que además han sido víctima de un terrible suceso. Will se sentirá totalmente intrigado y se pondrá a investigar para descubrir algo al respecto. Conocerá entonces a Ann (Naomi Watts) una vecina que conoció a quiénes vivieron allí antes.
Es muy, muy intensa, amiguitos. Os gustará.
