Amiguitos hoy he ido al súper y al ver los turrones y oír los villancicos por megafonía, me di cuenta de que las Navidades están a la vuelta de la esquina y como me encantan estas fechas he pensado en dedicaros un ciclo de cine familiar para cuando los peques tengan las vacaciones y no vayan al cole. Estuve mirando la catalogación de las películas que supuestamente son para niños y me ha parecido un desatino, quiero decir, que descubrí que aparecen como títulos infantiles algunos que yo no creo que sean apropiados para los menores. Así que pensando un poco en lo que sería mejor para los nenes y la falta de tiempo de los padres para ponerse a buscar películas para que se entretengan, se me ocurrió hacer una selección de cine especial para los jefecillos de la casa.
Si sois de los que vivísteis una infancia donde las Navidades os llenaban de ilusión mientras contábais los días que faltaban para que llegaran Papá Noel o los Reyes Magos mientras apuntabáis en un papel los regalos que queríais a la vez que los veíais en los anuncios de la televisión, este ciclo os va a gustar y a transportar en el tiempo.
Evidentemente no podré obviar cintas de la casa Disney, que nos hizo y nos hace a algunos felices, y considero que cualquier niño debería ver todos sus clásicos, aunque pertenezcan a generaciones anteriores, pues potencian valores necesarios para el desarrollo de cualquier persona. Así que es normal que entre los títulos que recomendaré estos días, muchos sean de la factoría Disney.
Comenzaremos con un clásico ambientado en Londres que se estrenó en 1953: Peter Pan. Si hay un film que hable de la magia y la infancia ese es Peter Pan. Todo en esta peli es adorable: el lenguaje, los personajes, el argumento, el doblaje... Habla sobre lo maravilloso que es ser un niño y sobre lo que se puede alcanzar a través de la imaginación. La banda sonora es absolutamente encantadora y el simbolismo de poder volar si de verdad lo deseas, despierta la autoconfianza en los chavales. También se hace alusión a la importancia de otros conceptos como la amistad, la familia (destacando sobre todo la figura de las madres), la inocencia y la necesidad de compartir.
Todo esto ha dejado de plasmarse en el material audiovisual que ofrecemos hoy en día a los niños. No permitamos que escuchen música inapropiada o que vean películas que no fomenten buenos sentimientos. Cada día veo como alejamos a los peques de la idea que teníamos antes de la infancia; cuando todavía uno podía llenarles de ilusión a través de una fábula o hacerles creer que pueden conseguir cualquier cosa que se propongan. Hagamos posible que su mundo sea un poco mejor.
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