LAS BRUJAS DE ZUGARRAMURDI

En una vida pasada debí ser muy, pero que muy mala persona, porque si no, no me explico por qué me castigan haciendo películas como "Las brujas de Zugarramurdi". Vergüenza ajena es un término muy escueto para describir lo que he sentido al ver esta atrocidad. Encontrar a Carlos Areces, Santiago Segura y Macarena Gómez no ha sido suficiente para poder tragarme esta sarta de estupideces, aunque sí os digo que ha sido lo mejor con diferencia. Por cierto, no sé si por mi tono habréis deducido que esta película es una mierda. Una Estafa Peliculera de los pies a la cabeza. 

Os hablaré de los efectos. Qué monstruosidad. Cosa tan mal hecha no había visto en mucho tiempo. Repito: Horror.
Guión: malo. Argumento: malo. Efectos: Malos. Fotografía: Mala. Dirección: Mala. Y digo yo: ¿De qué sirvió hacer esta película? ¿Cuál era su intención? Es decir, ¿hay algún motivo por el que haya personas que quieran pagar por verla? Sin acritud, ¿eh? Verla es como recibir un puñetazo de frente.  

Dicho todo esto, creo que voy a tomarme una tarta. Será lo mejor para tratar de reducir el impacto. Os lo digo en serio, creeréis que os están apuñalando los ojos. Avisados quedáis.